Con una ubicación de indescriptible belleza, este hotel se sitúa entre las montañas que conforman la Ruta de los Pueblos Blancos de Andalucía. La localidad de Cádiz está a una corta distancia en coche, al igual que Ronda y el increíble parque de la Sierra de Grazalema, emplazamientos ideales para todos aquellos viajeros deseosos de explorar los alrededores y disfrutar de un oasis de paz y tranquilidad en esta inigualable localización. El hotel goza de un encanto especial y ofrece la calidez de un entorno rústico, acogiendo a los huéspedes con la garantía de un servicio basado en la excelencia y en la hospitalidad. Las habitaciones poseen un estilo minimalista y son el lugar ideal para relajarse y disfrutar de un sueño ligero al final del día. Además, la propiedad pone a disposición de sus huéspedes una gran cantidad de instalaciones para cubrir todas sus necesidades, tanto de ocio como gastronómicas.